Stones in the sky

Bajo las dos torres, una topografía orgánica de planicies, crea plataformas para los peatones obteniendo tres niveles de restaurantes, tiendas y servicios. Al elevarse, se transforman en terrazas para comer con amplios puentes que conectan las formas. También permite la máxima porosidad a través del bloque, creando una serie de vías. Teje a través de la manzana, para conectar los dos barrios que se encuentran en esta intersección.
La conectividad era la intención y el flujo de peatones irrigará los frentes de las tiendas a lo largo de estas circulaciones. Los subterráneos y entradas en niveles bajo tierra, se ubican para capitalizar las salidas del sistema subterráneo de metro.
La sustentabilidad se busca en las fachadas sombreando los cristales de la doble piel del edificio de oficinas con celosías que maximizan la luz día usando repisas reflectantes.
Las profundidades de las celosías permiten que los paneles verticales de vidrio se sitúen a horcajadas y formen la curva sin recurrir a geometrías de vidrio inusuales.